Descanso dominical
tras una semana agitada y agotadora (proyecto Everest, Rentrée, Talent at Home)
que ha salido a pedir de boca. Entrenamiento de Zoe en el Centro de
Tecnificación AR10 esta mañana, delicioso almuerzo familiar, merecida siestita,
lectura de prensa y libro y un episodio de Madam Secretary, sobre la actividad
de la Secretaria de Estado de EE UU.
He estado leyendo
sobre Jeremy Corbin, nuevo líder de los laboristas británicos. Mi amigo John
Carlin le saludaba en ‘Bienvenido Mr. Corbyn’: http://internacional.elpais.com/internacional/2015/09/12/actualidad/1442077641_627480.html
“La energía de los fieles que le votaron proviene de la indignación”. “El nuevo líder laborista, que nunca ha ocupado un puesto ministerial en
sus 32 años como parlamentario, recuerda un poco al personaje que interpretó
Peter Sellers en la película Bienvenido Mr Chance, un jardinero abstraído cuyas
sencillas opiniones llegan a ser entendidas en Washington como ideas de una
enorme profundidad política, con lo cual acaba siendo considerado como
candidato a la presidencia de Estados Unidos. Pero la simple honestidad de
Corbyn, la aparente ausencia de una calculada política mediática cuando se
declara en contra de la guerra y a favor de la paz mundial, cuando establece
como prioridad oponerse a todo recorte al estado de bienestar, cuando aboga por
imponer más impuestos al gran capital: todo esto puede llegar a tener eco en un
país en el que muchos de sus habitantes están hartos de la vieja forma de hacer
política.”
Conxa Rodríguez llama a Corbyn “inmutable
maestro de la protesta”. Y cita al portavoz laborista de educación: “nos
cantaremos las melodías que nos gustan a nosotros mismos sin conectar con la
gente”. Gente de su propio partido (especialmente los fieles a Tony Blair)
declaran que no tiene posibilidad de ganar unas generales. E Ignacio Camacho lo
ha llamado ‘Retorno a la caverna’: http://sevilla.abc.es/historico-opinion/index.asp?ff=20150913&idn=1621955393694
Corbyn es para él “un fósil tardomarxista elegido por una izquierda juvenil
deslumbrada por rancias baratijas ideológicas”.
Así son los tiempos ‘Del Capitalismo al
Talentismo’. He estado leyendo el último libro de mi admirado Daniel Inerarity,
catedrático de filosofía política y social de la UPV y presidente del Instituto
de Gobernanza Democratica, ‘La política en tiempos de indignación’, con prólogo
de Josep Ramoneda.
Inerarity divide su texto en cinco partes, con
una introducción: “la política explicada a los idiotas” (en la Grecia clásica,
el idiotés era quien no participaba en los asuntos públicos y prefería
dedicarse exclusivamente a sus asuntos privados). Citando a Hannah Arendt,
“quien quiera hoy hablar acerca de la política ha de comenzar con todos los
prejuicios que se tienen contra ella”.
A.
¿Quién hace la política?
1. Viejos y nuevos
sujetos políticos: la “clase política”, la política de todos y la de unos
pocos, la función de los expertos en una democracia (“la política es una
actividad que requiere articular el equilibrio entre la gente, los expertos, los
funcionarios y los profesionales de la política”).
2. ¿El final de los
partidos? Se acaba “la era de los contenedores”, hay volatilidad de los
electores, ambigüedad de los partidos, final del control monopolistco.
3. Políticas del
reconocimiento: pasamos de la redistribución al reconocimiento (“los conflictos
se han desplazado desde los escenarios de clase, igualdad y economía hacia el
espacio de la identidad, la diferencia y la cultura”). Un nuevo tipo de
liderazgo, “más psicológico y más sensible”. El “quién” también importa, con
nuevas demandas de equidad.
4. ¿Derecho a
decidir?: Quién decide qué, paradoja constitucional, autodeterminación
transnacional.
B. La condición política.
5. El tiempo político: la incertidumbre de la política, que va
demasiado pronto o demasiado tarde, ue relativiza éxito y fracaso.
6. El discurso político. “La política es una forma de hacer cosas con
palabras”. La retórica y las ideologías están bajo sospecha, el combate por
adueñarse del discurso, la verdad y la mentira en sentido extrapolítico. “Hay
que desconfiar de aquellos que acusan a
otros de mentir en política” (Bruno Latour).
7. La política de las emociones. Frente al racionalismo, lo
sentimental, hasta llegar al desorden emocional-populista. “La compasión, que
es un signo de humanidad, también tiene sus caprichos” (Lipovetsky).
8. La importancia de ponerse de acuerdo. Escenificación del
antagonismo, generación de compromisos, el peso de las campañas (y sus
promesas) en los gobiernos.
9. La decepción democrática. “Hay un fracaso siempre que hay una
acción” (Sartre). Desconcierto del Leviatán protector, “la democracia es un
sistema político decepcionante porque apunta a ideales inalcanzables”, democracia
compleja, malentendidos acerca de la naturaleza de la política.
C. La política en tiempos difíciles.
10. La era de los límites. Austeridad. Personalización del liderazgo,
Transformación de los conflictos, Escasas posibilidades de la política
económica. Nuevas tareas de la política: “No se trata de arbitrar entre más o
menos Estado (que es un debate antiguo y superado), sino de concebirlo de otra
manera.
11. La política después de la indignación. Desde el 2011 (15M),
transformación democrática. “Nuestros sueños no caben en vuestras urnas”.
Creciente desconfianza democrática.
12. Democracia sin política. Ciudadanía intermitente (“clicktivismo”),
ideología del soberano negativo, despolitización involuntaria, gran ruptura
entre racionalización (tecnocracia) y populismo. “Paradójicamente, mientras
nuestros sistemas políticos no introduzcan en su funcionamiento una perspectiva
que supere el cortoplacismo electoral, estaremos promoviendo esta astucia
sistémica que luego lamentamos como carente de legitimidad democrática”.
D. Algunos lugares comunes
13. Democracias de proximidad y distancia representativa. Voluntad de
desintermediación, democracia en directo, elogio de la distancia política (los
politólogos hablan de “pandering” y de “priming”, gobernantes como meros
ejecutores de los deseos de los ciudadanos), paradojas de la autodeterminación
democrática, la representación como relación autorizada y “outsourcing
populista”.
14. ¿Cuánta transparencia requieren y pueden soportar nuestras
democracias? Estamos en la “sociedad de la observación”, con los inconvenientes
de ser observados. ¿Transparencia o publicidad? La vida privada de los
políticos, en el punto de mira. Del poder de la palabra a la democracia ocular:
“El poder de lo visual empobrece el nivel de discurso político”.
15. La importancia y los límites de moralizar la política. La hora de
la ética pública, los valores (“Si hay que tener cuidado con los valores no es
porque no existen, sino porque hay demasiados, es decir, en competencia,
necesitados de concreción y equilibrio”), la debilidad de la política: “Las
propuestas de regeneración de la vida democrática no necesitan tanto de
iniciativas legislativas o reformas de la administración como de recuperar una
visión estratégica a largo plazo”.
16. Lo que queda de la izquierda y la derecha. ¿Es la realidad “de
derechas”? ¿Es el mercado “de izquierdas”? En la credibilidad democrática, hay
una cierta “teoría del empate”.
E. El futuro de la política.
17. La política como actividad inteligente. “El poder tiene el
privilegio de no necesitar aprender” (Karl Deutsch, 1963). Hay un déficit
estratégico en la política (¿Vendes o aprendes?), un exceso de personalización,
un sistema que debe saber mejorar. “El futuro de la democracia depende de su
capacidad de estar a la altura de los desafíos que plantea una sociedad del
conocimiento”. “Aprender o no aprender, esa es la cuestión” (Luhmann, 1975).
Un libro importante, que nos habla de la política en un mundo VUCA
(volátil, incierto, complejo y ambiguo) y que apela a una visión estratégica y
a la voluntad de aprender (ya sabes, “el talento que no se aprecia se
deprecia).
Y otro de John Carlin, en ‘El córner inglés’ sobre ‘La astucia de
Messi y la Reina de Inglaterra’: http://deportes.elpais.com/deportes/2015/09/13/actualidad/1442128596_615480.html
Leo Messi y la reina Isabel son dos de las personas más famosas del planeta,
baten récords –de goles, de longevidad- y “han perfeccionado el arte de hablar
sin decir nada”. Citando a Gandhi, “habla solo si vas a mejorar el silencio”. Frente
a la incontinencia verbal de otros jugadores, la cautela.
Mi gratitud hoy a Cris y Carlos, a Carolina, Cristina y Zoe por un día
estupendo.