Domingo de paseo por la mañana (por la zona
de Nuevos Ministerios; hemos almorzado en Panenka) y descanso y lectura por la
tarde. He estado viendo en la tele (Yomvi) ‘La vida secreta de los bebés’ (un
documental sobre los dos primeros años de vida; fascinante) y ‘Dos madres
perfectas’ (‘Adore. Perfect mothers’), de Anne Fontaine. Dos grandes amigas
desde la infancia, interpretadas por Naomi Watts (‘Lo imposible’) y Robin
Wright (la primera dama de ‘House of Cards’), se sienten atraídas por el hijo
de la otra. Basada en la novela de Doris Lessing, narra una trama interesante
sobre la naturaleza humana.
Hace unos días mi buen amigo Joxe Mari Ulazia
me envió el libro ‘Otro fútbol es posible. El modelo Eibar’ de Álex Aránzabal.
Álex, presidente del Eibar, es profesor de Deusto (por tanto, compañero) y
experto en Calidad Total. Tuvimos la ocasión de presentar juntos el modelo del
club armero en una Semana de la Calidad de Euskadi.
Prólogo de Jorge Valdano (“no me extrañó que
el Eibar ascendiera a la Primera División. Lo interpreté como una metáfora de
su propio campo. De la misma manera que Ipurua desafía las convenciones
geográficas, el equipo ha rechazado las convenciones futbolísticas”) y
preámbulo de José Eulogio Gárate, nacido en Buenos Aires en septiembre de 1944
y en Eibar desde junio del 45, donde vivió su infancia y adolescencia. Ambos
nos hablan de un equipo estable, sensato y sin complejo alguno. Un equipo y una
ciudad que, gracias a Joxe Mari, a Álex y a muchos eibartarras, llevo en el
corazón.
El “Universo Eibar” se nutre de talento, en
un estrecho valle a orillas del río Ego, en la muga entre Guipúzcoa y Vizcaya,
famoso por su pujanza emprendedora. El autor nos recuerda que el lema de la
Escuela de Armería en su reciente centenario (en el que un servidor tuvo el
honor de participar en dos ocasiones) es “Gure gero, gura gara”: Somos el deseo
de seguir siendo. ¿Hay lema más humanista? Ama, no lo que eres, sino aquello en
lo que te puedes llegar a convertir. El espíritu eibarrés, en valores como el
compromiso, la dedicación, el esfuerzo, la iniciativa, la innovación, la
generosidad y la humildad. Fertilidad deportiva, con una afición en cuerpo y
alma.
Álex nos cuenta el modelo deportivo de la
S.D. Eibar, un club que casi asciende en 2005 a 1ª y después, al año siguiente,
descendió a 2ªB. Una Sociedad Deportiva con modelo deportivo bien definido (“¿Cómo
es posible que 8 futbolistas que estaban en Segunda B sean capaces de hacerlo
bien en Primera dos años más tarde?”),
perfiles de talento (jugadores con hambre y veteranos con experiencia).
El Eibar es el único equipo de primera sin filial; se nutre del Urko y de una
excelente red de contactos con otros clubes.
Un club armado… de valores. Es su único
imperativo, según el presidente. La LFP premió en 2014 al Eibar como “Club
Juego Limpio” y a su entrenador, Gaizka Garitano. En la pizarra, once líneas de
valores: De nuestras debilidades a nuestras fortalezas (Humildad y autoestima,
Modestia sin complejos, Consciencia de las limitaciones, Autoconocimiento,
Autocrítica), La camiseta: el mono de trabajo (Trabajo, Implicación, Entrega,
Lealtad, Esfuerzo, Sacrificio, Generosidad Laboriosa, Tesón), El equipo, entre
todos: todos contribuyen, todos ayudan, todos suman (Unidad, Coherencia,
Disciplina, Espíritu colectivo, Cooperación, Solidaridad, Empatía), El Escudo,
el Alma, Corazón armero: sabemos y sentimos lo que somos,a quién representamos
y cómo hemos de ser (Personalidad, Identidad, Memoria proyectiva,
Sostenibilidad, Sentido de Pertenencia abierta, Participación), Respeto y
Compromiso (Respeto al rival, al equipo propio, a uno mismo, a la afición, a
los colores, al árbitro, al fútbol, al deporte, a la sociedad, y Compromiso
deportivo, cívico y social), Espíritu de lucha y fortaleza de ánimo: cada
partido es una final (Afán de superación, Valentía, Coraje, Entereza, Pundonor,
Arrojo, Disputa, Combatividad), Juego recio, con fondo limpio y auténtico
(Nobleza, Honestidad, Sencillez), Dinamismo férreo e intenso (Estrategia firme,
Táctica de escuadra, Concentración mental, Solidez, Constancia, Defensa,
Disputa férrea, Exigencia física, Preparación atlética, Ritmo), Ir más allá, un
paso al frente (Audacia, Ilusión, Fe, Innovación, Atrevimiento, Ambición
oxigenada, Frescura, Desparpajo), Resiliencia (Dignidad, Saber perder y
Sobreponerse, Perseverar), Alegría compartida (Celebración, Saber ganar y
compartir los logros, Festejar y Disfrutar). El éxito, ya sabes, no es por
casualidad.
Álex nos cuenta el proceso de ampliación de
capital (1’74 M € en tres meses). La conquista es el derecho de hacer las cosas
de forma diferente. En los proyectos de futuro, cita a tres personas a quienes
admiro especialmente: Álvaro Merino, Guillem Martínez y Luis Rojas Marcos.
“Tenemos que conseguir que Eibar se constituya en un polo atractivo y cultural,
además de económico”. Una “sociedad empática” que busca regenerar la ciudad.
El de Álex Aranzábal es un gran ejemplo de
Liderazgo (en sus palabras, “el líder tiene que servir a las personas, a los
contextos y a los objetivos”). Porque “todo parte de una visión, de la
conciencia”.
Déficit cero y buen gobierno. En un día de
referéndum en Grecia, Álex opina que su experiencia le ha enseñado “que es
mejor evitar las votaciones, hacer que éstas sean innecesarias porque se ha
llegado al consenso tras el tratamiento y la deliberación de los asuntos”.
Aranzábal sabe tratar el triunfo y el fracaso
como dos impostores (Kipling) y nos regala como conclusión su “alineación” de
fuentes: Stanley Kubrick, Adam Smith, el empresario José María Basagoiti
Noriega, Richard Wagner, Jorge Luis Borges, el catedrático de Deusto Román
Gárate, Lou Reed y David Bowie, Bobby Fisher y Gary Kaspárov, Antoni Gaudí,
José Eulogio Gárate y Sócrates, su padre (Imanol Aranzábal Aristondo) y su
hermano (Imanol Aranzábal Mínguez). Le han enseñado exigencia,
libertad/responsabilidad, respaldo, totalidad, precisión, conversación,
rebeldía, lucha, desafío, estilo y serenidad. Grandes maestros.
Me ha gustado mucho el libro. Te lo
agradezco, Joxe Mari, y a ti Álex, y a quienes forman parte de este gran
proyecto colectivo que es la S. D. Eibar. Y eso que lo mejor está por llegar. Tengo
frente a mí, en la vitrina de trofeos de una vida, junto al “Brain & Heart”
de EBS, el del centenario de la Escuela de Armería: “Gure Gero – Gura Gara”. La
Virtud (areté) es Plenitud.