Era uno de los “disfrutes” de este descanso
estival es ver la primera temporada de ‘House of Cards’. Ayer vi los dos
primeros episodios y hoy otros dos. No me extraña que esté entre los cinco más
vendidos en estos momentos.
‘House of Cards’ es una serie de televisión
estadounidense producida por Beau Willimon. Está basada en otra de la BBC, del
mismo nombre, inspirada en la novela de Michael Dobbs. Cuenta la historia de
Frank Underwood (Kevin Spacey, en puro estado de gracia), líder de la mayoría
demócrata en el Congreso, al que el Presidente electo le ofrece ser Secretario
de Estado… y luego no cumple su promesa. Completa el reparto principal la
esposa de Frank, Claire (Robin Wright), Zoe Barnes (Kate Mara), una ambiciosa y
joven periodista que filtra las noticias, la jefa de gabinete del presidente,
Linda Vasquez (Sakina Jaffrey) y Doug Stamper (Michael Kelly), el jefe de
gabinete y confidente de Frank.
Un thriller político apasionante. La primera
temporada se emitió por Netflix en 2013 (obtuvo 19 nominaciones a los Grammy y
4 a los Globos de Oro). Se puede aprender mucho de la política de Washington,
de lo que hay que hacer y de lo que no debe hacerse. En cualquier caso, el
protagonista de ‘House of Cards’ muestra las 3 E del Liderazgo: Estrategia (el
congresista Underwood tiene las ideas claras y sabe lo que quiere conseguir),
Equipo (cuenta con colaboradores leales para alcanzar lo que se propone) y
Energía (entusiasmo y optimismo, así como serenidad en los momentos difíciles).
Como una especie de “personaje shakespeariano”, Underwood comparte con nosotr@s
sus reflexiones y sus lecciones sobre el poder y sobre la naturaleza humana.
He estado leyendo ‘Woman Up! Overcome the
seven deadly sins that sabotaje your success’ (¡Arriba las mujeres! Supera los
siete pecados capitales que sabotean tu éxito), de Aimee Cohen, coach de
carrera de Denver. Nació en Nueva York, ha vivido en España y se dedica al
coaching desde 1998.
Los “pecados capitales” que obstaculizan una
carrera profesional (y que, como dice la autora, los suelen sufrir más las
mujeres que los hombres) no son los clásicos. Son “el enigma de la amabilidad”
(querer complacer a los demás), “la evitación de competir”, “la prisión del perfeccionismo” (eso de querer
hacerlo todo perfecto), “la adicción a la afirmación” (decir a todo que sí),
“la enfermedad de la divulgación” (no ser suficientemente discreta), la falta
de comunicación (no poner en valor lo realizado) y “la epidemia de la minusvaloración” (confundir
eso con la humildad).
Aimee nos enseña, por ejemplo, a decir No con
Autoconfianza de varias maneras, como:
- Parece una buena idea. Sin embargo, no está
alineada con mis objetivos en este momento.
- No puedo comprometerme con esto en lo que
queda de año.
- Tal vez no sea la mejor persona para esa
tarea.
- Ojalá pudiera, pero como regla general no
trabajo los fines de semana.
- Gracias por pedírmelo, pero no puedo hacer
otra cosa que declinarlo.
Para las “superwoman”, algunos datos
relevantes: 98% de las emprendedoras aseguran que tener un mentor ha sido clave
en su éxito; la formación eleva la productividad el 24%, combinada con
coaching, el crecimiento es del 88% (ASTD); l@s profesionales con
mentores/coaches ganan entre 5.610 y 22.450 $ más al año que l@s que no lo
tienen (HR Magazine).
El capitulo final del libro de la Sra. Cohen
es ‘From Sin to Success’ (Del Pecado al Éxito). Como todo el mundo sabe, los
pecados capitales se contraponen las siete virtudes. Contra el pecado de
Soberbia, la Humildad. Contra la Avaricia, la Generosidad. Contra la Lujuria,
la Castidad. Contra la Ira, la Paciencia. Contra la Gula, la Templanza. Contra
la Envidia, la Caridad. Y contra la Pereza, la Diligencia.
En el caso de los pecados contra la Carrera
Profesional, frente a querer complacer siempre a los demás, pensar en una
misma; frente a evitar competir, disfrutar de la competición;
frente al perfeccionismo, la optimización; frente a decir a todo que sí,
valorar pros y contras; frente a la divulgación, la discreción; frente al
silencio en lo que un@ logra, la comunicación y
frente a la minusvaloración, la justicia. Siete virtudes que debemos
activar en nuestra Carrera Profesional (preferiblemente, con la ayuda de un/a
coach: Autoestima, Competitividad, Gestión de la energía, Asertividad,
Discreción, Poner en Valor y Equidad.
Esta mañana he estado viendo ‘Viajo sola’, el
“sleeper” de la temporada en Italia. Escrita, dirigida e interpretada por Maria
Sole Tognazzi, trata la historia de Irene, una “cliente misteriosa” de hoteles
de cinco estrellas, que no tiene apenas vida propia (solo un ex y su
desmemoriada hermana). El argumento podría dar mucho juego, pero se queda en
nada. Una lástima. Esperaba mucho, visto el tráiler; a pesar de su corta duración
(85 minutos), ni engancha ni te hace reflexionar sobre el equilibrio de vida.
Experimento fallido.
Ya sabes: Carrera Profesional es la Evolución
de tu Talento. “Controla tu destino, o alguien lo hará por ti” (Jack Welch,
considerado el mejor directivo del siglo XX). Mi gratitud a Aimee Cohen y a l@s
mejores coaches de Carrera, a ambos lados del Atlántico.