Semillas voladoras

Salida de Florencia a Venecia en autocar a las 8 de la mañana. Más de 3 horas de trayecto por la autopista del sol, con una paradita a medio camino. Sigue el buen tiempo por esta preciosa zona de Italia.

En Venecia nos hemos alojado en el Hotel Danieli, el más emblemático de la ciudad de los canales. Almuerzo junto al puente de Rialto, con otros siete compañeros del Challenge 2011. A las 4 hemos ido a ver la exposición de la colección Marlini, organizada por el Comisario de la Bienal de Venecia, Stefano. El propio Stefano y la Directora del Museo nos han presentado a los pintores italianos del Novecento: Modigliani, De Chirico, etc. Posteriormente, hemos visitado el Museo de la Música (con instrumentos de la época de Vivaldi) y una maravillosa iglesia con enormes fotos de Juan XXIII y Juan Pablo II. El paseo con Mario Alonso Puig, Baldomero Lago, Guillermo, Félix ha sido precioso.

Ya en el hotel Danieli, Mario y un servidor nos hemos subido a la terraza del hotel para tomar un capuccino y seguir charlando. Ver el atardecer desde la terraza del Danieli, con la salida de los trasatlánticos (entre ellos, el Queen Elizabeth), es un espectáculo fascinante.

Tiempo para prepararnos y a las 8 en recepción. Cada uno de los seis equipos del Challenge 2011 (Verdi, Neri, Blanchi, Rossi, Azurri y Gialli) han tomado una góndola, y los Magistri con ellos, y hemos recorrido Venecia desde los canales. Si es bonito pasear en góndola de día, aún lo es más hacerlo de noche. Inolvidable.

Cena de Gala en el propio Hotel Danieli, precisamente en el restaurante de la 4ª planta, reservado íntegramente para nosotros.

He tenido el honor de dar la bienvenida a los asistentes, les he hablado de la “palabra oculta” que ha estado presente en todo el Challenge (en Roma, Asís, Florencia, Siena, Venecia): Marcello, de la banda sonora de la bellísima película “Anónimo Veneciano” y les he pedido que cerraran los ojos y escucharan en silencio, para reflexión y recogimiento, los 4 minutos del Concierto para Oboe en Do Menor de Marcello: www.youtube.com/watch?v=qb5xiuE1VUE&feature=related. Ha sido uno de los momentos mágicos de la noche.

Han hablado durante la gala José María Alonso, Baldomero Lago, Guillermo Sánchez y Mario Alonso Puig (que nos ha recordado que muchas veces buscamos lejos lo que tenemos muy cerca). Han agradecido cada uno de los equipos este Challenge y, en una vistosa ceremonia de banderas, se ha proclamado vencedor al equipo Verdi.

Los Azzurri han regalado a la organización una preciosa máscara veneciana (con los colores de EBS) y los Magistri, un “Hombre de Vitrubio” de mármol en tres dimensiones, como símbolo de que EBS le aporta al Humanismo una nueva dimensión. La petición de un abrazo final por parte de Carlos Ongallo ha desatado las emociones a flor de piel.

Trini ha mencionado con elocuencia que los miembros de EBS (el equipo organizador, los participantes en los programas y todos los demás) somos "Semillas voladoras" que debemos seguir fructificando.

Esta semana es una de las que más he aprendido en toda mi vida sobre trabajo en equipo real. La necesidad de cohesión del ser humano es fascinante. Como ha dicho Mario, los Magistri hemos sido sobre todo alumnos de lo que ha pasado.

Le agradezco a todo el equipo de EBS, liderado por Carlos, con Israel, Raúl y las siete “princesas”, además de a Noelia (Halcón Viajes) y Fernando su extraordinaria ayuda.

El Challenge 2011 ha muerto. Viva el nuevo Challenge.