Aprender a ser feliz

Desayuno (tardío, a eso de las 10.30) en el hotel, playita hasta la hora de comer, visita a El Corte Inglés para hacer unas compras, piscina y algo de gimnasio/spa por la tarde y cenita en Puerto Banús, en un restaurante brasileño al aire libre… Así son las vacaciones, un alto en el camino.

He estado leyendo Tú puedes aprender a ser feliz, escrito “a cuatro manos”, como dicen ellas, por la psicóloga Carmen Serrat-Valera y la periodista Alexa Diéguez. Se trata de un voluminoso (617 páginas) tratado en el que compendian qué sabemos hoy sobre la felicidad (que al fin y al cabo es una actitud ante la vida, que se construye) y cómo conseguirla.

Tú puedes aprender a ser feliz está estructurado en cuatro “pasos”. El primero es entender cómo funciona el comportamiento: “La vida es una obra de teatro que no admite ensayos (…). Por eso, canta, ríe, baila, llora y vive intensamente cada momento (…) antes de que el telón baje y la obra termine sin aplausos”, Charles Chaplin. Nociones sobre la felicidad, sobre las personas que triunfan en la vida (Álex Rovira), sobre los factores externos y la genética, sobre el placer, el compromiso y la búsqueda de significado. “Es posible aprender a ser feliz, pero hay que trabajar con constancia para conseguirlo”.El comportamiento lo conforman tres componentes: cognitivo (pensar), emotivo (sentir) y conductual (hacer). El libro muestra el modelo ABC de Albert Ellis y nos anima a analizar nuestros comportamientos cotidianos.

Segundo paso: remover aquellos obstáculos que nos impiden ser felices. Las autoras nos sugieren hablarnos a nosotros mismos de otra manera (la fuerza del diálogo interior), evitar bloquearnos ante problemas potenciales (“Duele más el miedo al dolor que el dolor”), contemplar los problemas como un desafío y una oportunidad para crecer en lugar de verlos como una amenaza… Todo ello requiere de mucha práctica.
De entre las muchas pequeñas historias que recoge el libro, me quedo con ésta de Javier López Martínez: “La gallina y el gorrión son animales fieros, el tigre y el león son animales mansos”. “La gallina y el gorrión son animales fieros, el tigre y el león son animales mansos”, repitió mamá gusano a su hijo el gusanito.
“Amar es encontrar en la felicidad de otro tu propia felicidad”, Leibniz.
Y dos citas sobre el esfuerzo: “Nuestra recompensa se encuentra en el esfuerzo y no en el resultado. Un esfuerzo total es una victoria completa”; Gandhi. “Cualquier esfuerzo resulta ligero con el hábito”, Tito Livio. Tras enumerar y detallar 33 posibles obstáculos (el más peligroso es la comparación social), Carmen y Alexa nos hacen una invitación al coaching: “Mírate en el espejo de ti mismo y serás libre y fuerte y dejarás de ser un títere de las circunstancias porque tú mismo eres tu destino. Elige el guión de tu propia vida. Llévalo a cabo y triunfarás. No pienses en la suerte porque la suerte es el pretexto de los fracasados”:

El tercer paso es Aprender a convivir con cinco emociones fundamentales: estrés, enfado, miedo, culpa y envidia. Son emociones ‘negativas’, en ocasiones útiles, que conviene canalizar. Para afrontar el estrés, relajación, respiración, valoración de las situaciones, nivel de autoexigencia, aprender a anticipar los cambios, aceptar la incertidumbre, organizarte el tiempo… Si nos enfadamos a menudo, analizar las creencias que lo causan, detectar las señales, repasar la curva de hostilidad… Enfrentarnos sabiamente al miedo. Separar la culpa sana (que regula el comportamiento humano), la responsabilidad, de los sentimientos de culpa. Aprender a liberarnos de la envidia: practicar la amabilidad, valorar lo propio, aceptar que todo el mundo tiene derecho a ser feliz…

Y el cuarto paso es recorrer los caminos que te conducen al bienestar. Hasta 24: Un firme propósito; metas y objetivos (“las metas son las piedras preciosas del crecimiento personal y el desarrollo de la autoestima que encontramos en nuestro camino hacia la felicidad”); disciplina y perseverancia (“las cosas son como son, pero tú puedes trabajar para que tu vida sea como tú quieres”); descubrir tus fortalezas; aprender de las crisis (“el éxito es euforia; la crisis, reflexión”, Antonio Miró); simplificar tu vida; vivir el presente; aprender a valorar lo que tenemos; convertir la vida en un largo camino de crecimiento personal; cuidar y mimar tus relaciones (“la única manera de tener un amigo es ser un amigo”, Ralph Waldo Emerson); poner endorfinas en tu vida (estar con gente feliz, besar y que te besen, reírte, estar relajado, disfrutar de una buena comida, ejercicio físico, etc); cultivar el optimismo; practicar el sentido del humor; cuidar tu estilo de vida (alimentación, sueño, ejercicio); cultivar tu espiritualidad (experiencias que trascienden los fenómenos sensoriales); aprender a meditar (Vivaldi conduce al estado alfa); cultivar la gratitud (“la oración más importante del mundo tiene una sola palabra: gracias”, Eckhart Tolle); aprender a perdonar (“el resentimiento es como beber un vaso de cianuro y pretender que sea el otro el que se muera”, Carmen Serrat-Valera); hacer cosas por los demás (generosidad); cultivar el amor incondicional (“el amor no da nada fuera de sí mismo ni toma nada fuera de sí mismo. El amor no posee ni es poseído porque el amor es suficiente en el amor”, Khalil Gibran).

Un libro enciclopédico, utilísimo, que pienso usar frecuentemente como coach para ayudar a mis pupilos. Gracias, Carmen y Alexa, por un texto tan completo y práctico para avanzar en la felicidad. Se convertirá en uno de los libros de referencia sobre el tema, a buen seguro.