Liderazgo de Crisis Permanente

Último día de julio, festividad de San Ignacio de Loyola. Felicidades a los “nachos”. Primer día de descanso de facto, entre piscina, algunas compras de libros y de DVDs y comida en el Cinco Jotas de la calle Serrano.

Esta tarde he continuado con mi particular Máster de Cine Español, Iberoamericano y Europeo con La gran familia (1962), de Fernando Palacios producida por Pedro Masó. Es la historia de los Alonso, un aparejador pluriempleado (Alberto Closas), su esposa (Amparo Soler Leal), sus 15 hijos, el abuelo (Pepe Isbert) y el padrino, José Luis López Vázquez). Como escribe Antxon Salvador en Español de cine, “se mueve entre la noñería de La casa de la pradera y el surrealismo”. Declarada en su día de interés nacional, es una muestra muy interesante de cómo eran (y/o querían ser) las familias en los 60. Se respira un optimismo ante la escasez de medios (por ejemplo, van a la playa por primera vez en una furgoneta, tardan más de 10 horas entre Madrid y Tarragona y tan contentos. Ahora nos quejamos de que el AVE cubra el trayecto en más de dos horas) y una solidaridad que nos resultan ajenos y casi utópicos. Mi hija Zoe era la primera vez que veía la película (le ha extrañado que fuera en blanco y negro) y se la ha visto de un tirón. Ya tiene, como todos nosotros, en su memoria cuando se pierde Chencho, el niño de dos años, en la Plaza Mayor en nochebuena. Es la televisión la que consigue rescatarle. La "caja tonta" era una novedad para la época (cuando se estrenó la película, apenas llevaba en España cinco años de vida). Nadie podía haber previsto su impacto actual.

Entre las lecturas del día, el número de julio-agosto de 2009 de la Harvard Business Review, dedicado a Gestionar en un nuevo mundo (otra manera de decir que no estamos viviendo un cambio de modelo productivo, sino de modelo directivo). Una frase de Peter Drucker (HBR, 1961): “Hemos de admitir algo elemental: que tomar una posición defensiva nos ayudará, a lo sumo, a limitar las pérdidas. Pero necesitamos obtener ganancias”. Niall Ferguson, profesor de Harvard, nos ofrece respecto a las finanzas dos escenarios posibles en 2013: el segundo mandato de Obama (la recesión ha pasado, hay nuevos bancos, un IRPF de hasta el 35% y un déficit de 17 B $) o el primer mandato de Jeb Bush (la recesión continúa, quedan la mitad de bancos, impuestos hasta el 45% y una deuda federal de 20 B $). Y cierra el artículo citando a Otto Von Bismarck: “Dios cuenta con una especial providencia por los locos, los borrachos y los Estados Unidos de América”.

En el mismo número, Eric Beinhocker, Ian Davis y Lenny Mendonca (McKinsey) proponen Diez tendencias estratégicas a vigilar:
1. Escasez, volatilidad y subida de precios de las materias primas.
2. La globalización bajo el fuego (a causa del proteccionismo)
3. Necesidad de confianza entre los negocios y la sociedad civil
4. Un mayor papel del gobierno
5. El management como ciencia
6. Elevación de las pautas de consumo (no crecerá igual)
7. El auge de Asia (del 7’1% del PIB mundial en 1980 al 22’8% en 2010)
8. El nuevo modelo industrial
9. El triunfo de la innovación
10. La estabilidad de precios en cuestión

Y mi artículo favorito de esta revista, Liderazgo en Crisis Permanente, de Ronald Heifetz (fundador del Centro de Liderazgo Público de la Universidad de Harvard), Alexander Garshow y Marty Linsky, profesores del Centro. La tesis de estos tres profesores es que, respecto al Liderazgo, tras la crisis las cosas no van a volver a ser como eran. Las tareas del nuevo Liderazgo son principalmente Elevar la adaptación, Abrazar el desequilibrio y Generar liderazgo a todos los niveles de la organización. El artículo nos aconseja Cuidarnos de nosotros mismos, y eso significa, en la práctica:
- Darte permiso para ser optimista y realista
- Encontrar refugios (generalmente mal traducido por “santuarios”) para reflexionar y ganar perspectiva
- Contar con confidentes, para llevar las ideas a la acción
- Dar más de ti mismo emocionalmente
- No perderte en tu rol (te hace demasiado vulnerable cuando las cosas cambian)

Toda una invitación al coaching estratégico. Si desde Harvard lo dicen, habrá que hacerles caso.

Además, la dirección del Eurasia Group establece una evaluación de riesgo por países, con cuatro factores: Vulnerabilidad del PIB (entre 1 y 30, siendo el 1 el menos vulnerable), Vulnerabilidad de exportaciones (también entre 1 y 30), Capacidad para actuar y Voluntad para actuar del gobierno (en ambos, del 1 al 5 siendo el 5 lo mejor). A España le dan 17-14-5-4. A EEUU, 9-8-5-4. A Argentina, 26-12-2-2. A Brasil, 11-2-4-3. A Chile, 5-24-5-4. A China, 8-9-5-4. A Colombia, 16-6-4-3. A Alemania 20-11-5-4. A la India, 6-10-3-2. A Sudáfrica, 10-1-3-3. A Turquía 27-13-3-3. Y al Reino Unido 15-3-4-3.