Bellaterra / De ti depende

Por la mañana, he participado en el Primer Congreso El Capital Humano en el Sector Turístico: proceso y desafío para las empresas líderes del futuro, organizado por la Universitat Autònoma de Barcelona (Bellaterra) y la Escola Universitària de Turismo i Dirreció Hotelera, adscrita a la UAB.

Han inaugurado el Congreso el Director General de Turismo de la Generalitat de Catalunya y las autoridades de la Universitat Autònoma de Barcelona. He tenido el honor de participar en la primera mesa redonda, bajo el título Habilidades y Competencias de los futuros profesionales del sector, junto con el Dr. Melcior Mateu (Presidente de Honor de AEDIPE Catalunya) y moderado por José Miguel Rodríguez Antón, catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid y viejo amigo y compañero. José Miguel ha recordado que tanto la UAB como la UAM y la Universidad del País Vasco (UPV) nacieron en el 68 y han cumplido 40 años. Lo he pasado muy bien escuchando a Melcior y José Miguel, que nos han aportado nuevos datos sobre el turismo y sus profesionales, así como en las comunicaciones anteriores.

Hemos almorzado juntos los organizadores, los ponentes de la mañana y los de la tarde (Fernando Bayón, la doctora Ángeles Rubio, etc) y hemos vivido un momento estupendo.

En el avión (puente aéreo) de las 15.45 horas, he leído varios artículos sobre la promoción del turismo de la ciudad condal y la peli Vicky Cristina Barcelona. Joan Subirats nos ofrece las cifras de www.barcelonaturisme.com. Desde 1990 se ha cuadriplicado la cifra de turistas (más de 7 millones en 2007 y 13 millones de pernoctaciones), la ciudad de mayor crecimiento en Europa en los últimos 10 años. 30 millones en el aeropuerto y más de 2 millones anuales en crucero. “El éxito de Barcelona es la expresión de la gran capacidad de atracción de la buena vida mediterránea” (Mario Gaviria). Vicente Molina Foix pone de manifiesto que en la cinta de Woody Allen, “ las chicas circulan por una ciudad que, más allá de sus monumentos, resulta un lugar fantasma donde el catalán pertenece al pasado, los catalanes figuran como comparsas (¡esos amigos del pintor protagonista Juan Antonio González, nombre, por cierto, tan de la tierra!) y nadie pronuncia una sola palabra en la lengua autóctona.” (…) “La excursión asturiana es corta, levemente prerrománica y sin gaitas.” (…) La anomalía suprema de esta película marciano-española es que también en el resto del país la mayoría de los espectadores ha de verla en una versión que, más allá del rodaje en inglés, ha perdido lo único genuino que tenía: las voces de Penélope y Javier. (…) Tengo la impresión de que los ciudadanos del país que ha hecho posible Vicky Cristina Barcelona ignoran que pagan por ver un producto sin identidad y sin lengua propia. Ni siquiera la común.”

Por la tarde, presentación del libro De ti depende, de Ignacio Álvarez de Mon (Instituto de Empresa) en el Aula Magna del IE. Hemos arropado en el acto Pilar Jericó, José Mari Irisarri y un servidor, con Vicky Jimeno (responsable de antiguos alumnos del IE) como maestra de ceremonias. El Aula Magna estaba abarrotada, con medio centenar de personas que se han quedado de pie. Pilar ha glosado la obra de Ignacio, yo he hablado de varios momentos vitales (una comida con Ignacio y José Mari hace dos años, en la que el autor nos manifestó que quería escribir un libro, cuando me enteré de su publicación, su lectura y el evento de hoy) y he utilizado fragmentos de tres películas de Vértice 360º: Tiempo de valientes, Deliciosa Marta y Odette. José Mari ha hablado como directivo, en primera persona, de la utilidad del libro. E Ignacio se ha centrado en el agradecimiento.

Ha sido un acto entrañable, cariñoso, con una atmósfera maravillosa, en el que Ignacio Álvarez de Mon ha estado acompañado de su familia, amigos, personas sensacionales. Un privilegio haber asistido y haber podido participar.


Quiero recordar este “Ítaca” (lugar lejano, en griego) del poeta Constantino Kavafis que se reproduce en De ti depende, del que ya escribía en este blog en una ocasión anterior.

“Cuando emprendas tu viaje a Ítaca,
pide que tu viaje sea largo, lleno de aventuras, lleno de experiencias.
Ni a los lestrigones ni a los cíclopes ni al salvaje Poseidón encontrarás,
si no los llevas dentro de tu alma, si no los yergue tu alma ante ti,
si tu pensar es elevado, si selecta es la emoción que toca tu espíritu y tu cuerpo.
Pide que el camino sea largo.
Que sean muchas las mañanas de verano que llegues,
¡con qué placer y alegría!,
a puertos nunca vistos.
Ten siempre a Ítaca en tu mente.
Tu llegada allí es tu destino.
Mas no apresures nunca el viaje,
mejor que dure muchos años y atracar, viejo ya, en la isla,
enriquecido de cuanto ganaste en el camino sin aguardar a que Ítaca te enriquezca.
Ítaca te brindó tan hermoso viaje.
Sin ella no habrías emprendido el camino.
Pero no tiene ya nada que darte.
Aunque la halles pobre, Ítaca no te ha engañado.
Así, sabio como te has vuelto, con tanta experiencia,
entenderás ya qué significan las Ítacas”.