Desequilibrantes

26ª jornada de la liga española. Recreativo de Huelva – Real Madrid. Robinho sale en el minuto 72, a 18 del final. Hasta entonces, el partido iba 1-1, con un Madrid horrible. Su centro del campo perdía balones constantemente. A los 18 segundos de salir al campo, Robinho marcó el 1-2. Y después, el propio Robinho hizo el 1-3 (el partido acabó 2-3). Titular de Marca: “La liga es de Robinho”.
Entretanto, el Atlético de Madrid jugaba contra el F.C. Barcelona. El equipo visitante ganaba 0-1 en el minuto 29, merced a un gol de chilena de Ronaldinho. A las 6 minutos, el “Kun” Agüero empata. 6 minutos después, el jugador argentino da un pase a Maxi, que marca el 2-1. En el 61, al Kun le hacen un penalti, que transforma Forlán (3-1). 9 minutos después, el propio Agüero marca (4-1). El partido acaba 4-2. El titular del Marca es: “La liga es de Robinho… y del ”Kun” No cabe duda de que el jugador brasileño del Real Madrid y el argentino del Atlético son desequilibrantes (Leo Messi, argentino del Barça, también suele serlo, pero su entrenador no le sacó al campo hasta el minuto 56, cuando sustituyó a Henry. Lástima).

Aunque apuesto por el talento colectivo, por el equipo, por la generación de sinergias, creo firmemente en el talento desequilibrante, en esos genios que resuelven un partido, una situación comprometida, un evento especial. Como los futbolistas iberoamericanos mencionados, como el mítico Michael Jordan o ahora Pau Gasol en los Lakers, como Javier Bardem, como George Clooney, de quien decía la semana pasada que es el actor de su generación y dedica ésta Time su portada: “La última estrella de cine”. Actor comprometido, activista de Naciones Unidas, sus films favoritos son Un romance muy peligroso (1998, con Jennifer Lopez), Tres reyes (1999), Oh Brother (2000) y Buenas noches y buena suerte (2005). Los que detesta, El pacificador (1997, con Nicole Kidman) y Batman & Robin (del mismo año).

Hablando de desequilibrantes, he leído hoy Punk marketing, de Richard Laermer y Mark Simmons, (Editorial Planeta Empresa). Un libro excelente, provocador de cabo a rabo. Empieza con “Punk marketing no hubiera sido posible sin la ayuda de un sistema contra el que rebelarse. Quisiéramos dar las gracias a todos los carcas, estúpidos y mentecatos que han sido un obstáculo para lo inevitable durante demasiado tiempo”. Y concluye con: “pedimos perdón a todos aquellos a los que hemos ofendido con este libro. Ha ido a propósito.” ¿Qué es ser punk (al estilo de los Sex Pistols)? Es introducir caos en el sistema. Destacaría el “Manifiesto del Punk Marketing”, con 15 artículos:
1. Evita el riesgo y muere (en momentos de cambio, el mayor riesgo es no asumir riesgos).
2. ¿Por qué no preguntar “por qué no”?
3. Adopta una postura firme
4. No hagas la pelota (los clientes son importantes, pero no tienen por qué tener razón)
5. Olvídate del control (los clientes son ahora quienes controlan las marcas)
6. Sé honesto
7. Créate enemigos
8. Haz que quieran más (evita la tentación de mostrar todas sus cartas de una vez)
9. Sé más listo que la competencia
10.No te dejes seducir por la tecnología (el medio ya no es el mensaje. El mensaje es el mensaje)
11.Debes saber quién eres (si no eres consciente de qué es lo que se te da bien, podrías tener la tentación de intentar ser lo que no eres)
12.Se acabaron las mentiras en marketing (ve al grano y exprésate de un modo claro y simple)
13.No dejes que los demás definan tus principios (la mediocridad es más dañina que el hecho de no hacer nada)
14.Usa las herramientas de la Revolución (redacta tu propio manifiesto)
15.La gran pregunta, ¡oh, participante! (la revolución se basa en la interacción)

Laermer y Simmons, expertos en marketing, nos proponen “matar a los intermediarios (antes de que te maten a ti)”, destacar para ser “el elegido”, contar historias, etc. Para ser verdaderamente desequilibrante.